El PSOE quiere evitar una interpretación del congreso en clave de victoria para Pajín
Las alternativas en el congreso del PSPV parecen dos y únicamente dos: o Francesc Romeu lo decanta a favor de la «oficialidad» representada por la nueva dirección federal o ésta tendrá que admitir que la ex ministra Leire Pajín, mediante la figura interpuesta de Ximo Puig, se ha impuesto en el cónclave que los socialistas valencianos celebrarán en Alicante a partir del próximo 30 de marzo.
Ferraz, consciente de que el secretario general del PSPV puede sufrir un severo revés —que lastraría sus aspiraciones de candidato— con la negativa de una mayoría de delegados a aprobar su informe de gestión, valora otorgar un respaldo explícito a Romeu durante las próximas horas que contribuiría a redoblar las posibilidades de éste de convertirse en el próximo secretario general de la federación valenciana.
De hecho, según ha podido saber ABC, Romeu se reunió ayer en Madrid con su «mentor natural», José Blanco, y el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, con la idea de transmitir, por un lado, las pocas opciones de reválida de un Alarte cada vez más cuestionado y, por otra, el riesgo de que la federación valenciana se convierta en otro problema territorial para Rubalcaba una vez consumados los «fiascos» en este sentido de los congresos de Madrid y Galicia.
Según fuentes socialistas, el «baile» de delegados fijará la foto definitiva la misma noche del viernes 30 de marzo, cuando la labor de pasillos contribuirá a perfilar el nivel de apoyo definitivo de que dispone cada uno de los aspirantes.
El número de avales con el que llega Romeu a la cita le aseguraría al menos la vicesecretaría general en un eventual pacto con Puig. El directivo de Renfe cuenta, además, con los delegados que en los procesos previos al congreso han respaldado la opción de Manuel Mata.
La opción de Bielsa
Mientras, el grupo de afines a Alarte sondea diversas opciones para presentar un candidato en el que caso de que el actual secretario general arroje finalmente la toalla. El alcalde de Mislata, Carlos González Bielsa, ha emergido en las últimas horas como la única opción factible que baraja este sector.
A. C. /D. M
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