Recalca que "no hay ningún problema" en el seno del partido y que lo más importante es conseguir "un gran pacto para los valencianos
El candidato a la secretaría general del PSPV, Ximo Puig, ha destacado este jueves que "sólo un PSPV fuerte, unido y renovado puede cambiar el rumbo de las cosas, ofrecer la energía necesaria para reiniciar la Comunitat Valenciana e impulsar políticas de crecimiento que generen empleo y no sólo una espiral interminable de recortes que minan la cohesión de nuestra sociedad y la alejan de la recuperación".
Así lo ha manifestado en Madrid, durante la presentación de su candidatura bajo el lema 'Reiniciar la Comunitat Valenciana', en la Casa de Valencia, en un acto al que han asistido los exministros Leire Pajín, Miguel Sebastián, Carmen Alborch y Javier Gómez Navarro, el ex secretario general del PSPV Joan Ignasi Pla y diputados nacionales como Ciprià Císcar y Herick Manuel Campos.
Además, han arropado a Puig con su presencia en ese acto miembros de la ejecutiva nacional del PSOE como Antonio Hernando, Carmen Montón y Purificación Causapie, así como el secretario federal de acción sindical de UGT, Antonio Ferrer, entre otros.
En declaraciones a los periodistas momentos antes del comienzo, ha destacado que ve un "buen ambiente en el conjunto del partido", y que ahora están inmersos en un "debate democrático", en el que deben elegir "lo mejor para el partido y, sobre todo, lo mejor para la sociedad valenciana", algo que es su "obsesión" y para lo que trabaja.
Puig ha recalcado, en este sentido, que "no hay ningún problema" en el seno del partido y que lo más importante es conseguir "un gran pacto para los valencianos".
En su discurso, ha propuesto "establecer una nueva relación entre el PSPV y el PSOE y entre la Comunitat y España" porque su aspiración "no es sólo ganar un Congreso" en el PSPV, "sino hacer una amplia convocatoria a todos los que están dispuestos a contribuir a que la Comunitat Valenciana inicie un tiempo nuevo". "Y muchos de vosotros sois actores principales en este cometido", ha dicho a los presentes.
En su análisis de las consecuencias de la crisis, ha criticado que "la derecha alentó en toda España, pero especialmente en tierras valencianas, una carrera incontrolada de promoción del sector inmobiliario" y que, de ese modo, "los recursos que podrían haber ido a la innovación, la modernización y la internacionalización de nuestra industria fueron orientados a la especulación y al monocultivo del sector de la construcción".
Puig ha lamentado asimismo el desmantelamiento del sistema financiero valenciano y el haber visto cómo la industria "quedaba expuesta, abandonada y desarmada en la primera línea del frente de la nueva realidad de la globalización", con lo que "hoy, a diferencia de 1995, la Comunitat Valenciana tiene cinco puntos más de diferencial de paro respecto al conjunto de España".
A su juicio, el "poder absoluto" del PP en las instituciones de la Comunitat y la "complicidad" de determinados sectores agravaron la crisis y crearon "un campo abonado para el descontrol presupuestario, el despilfarro, los sobrecostes generalizados en las obras públicas y finalmente una situación de corrupción generalizada de la que pocas instituciones han quedado limpias".
"COLAPSO SIN PRECEDENTES" DE LA GENERALITAT
Según Puig, los ciudadanos "asisten atónitos a un colapso sin precedentes de la administración autonómica, que provoca el impago a las farmacias, a los abogados de oficio, a las escuelas e institutos públicos y concertados, a las universidades, a las empresas de asistencia social, a los suministradores de material sanitario y a los centros de investigación", entre otras empresas y entidades.
"Tras 17 años de gobierno del PP, hoy somos una tierra más pobre y menos libre", ha denunciado Puig, quien insta a "hacer un enorme esfuerzo colectivo para recuperar la senda del progreso y asegurar el futuro de las generaciones venideras", en una situación en la que cree que los socialistas son "la única fuerza alternativa con capacidad de sumar y con una acumulación de capital humano y la inteligencia suficiente para provocar el cambio que la sociedad demanda".
Así, ha pedido a los socialistas valencianos que se abran "con valentía a todos los sectores de la sociedad mediante una política que establezca nuevos vínculos con ellos" y que retomen su "cultura del pacto" y construyan "nuevos bloques sociales".
Para "conquistar" el futuro, defiende un nuevo modelo de crecimiento económico capaz de generar empleo, "en el que la educación se considera una inversión y en el que la innovación debe impregnar a toda la sociedad", a fin de construir una Comunitat en la que "si uno trabaja duro, debe poder ganar lo suficiente para mantener a su familia, ser dueño de su casa, enviar a sus hijos a la universidad, ser atendido por una sanidad pública de calidad, recibir ayuda si sufre una situación de dependencia y tener una jubilación digna".
FINANCIACIÓN "ADECUADA Y JUSTA" Y CORREDOR MEDITERRÁNEO
Además, ha reclamado que la autonomía reciba una financiación "adecuada y justa" y ha expresado su temor a que el Gobierno de Mariano Rajoy "aplace 'sine die' el Corredor Mediterráneo, imprescindible para el desarrollo económico de nuestra Comunitat".
En opinión de Puig, urge "un cambio profundo de mentalidades para hacer una economía diferente, que no esté basada en el negocio rápido o la especulación, sino que se sustente en pilares sólidos y duraderos", como el trabajo y la innovación, para "avanzar con firmeza y en la responsabilidad como camino hacia el éxito". Por su parte, ha ofrecido "trabajo" para una autonomía "con gobernantes dignos, fiables, honrados y con las manos limpias que actúen con transparencia y que fomenten la participación" y que tengan "los pies en el suelo".
EP
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